Fig 1. “2C-B” por Tetramode
- Descubierta por Alexander Shulgin en 1974
- Duración: Variada
- Asociada con psicoterapia underground y la escena psicodélica moderna
Fig. 2. “2C-B” o 2-(4-bromo-2,5-dimetoxifenil)etilamina
Orígenes
La historia de la familia química 2C comienza en 1974 con un hombre en particular, que a través de las décadas ha tocado las vidas de miles de personas. Lo que empezó como un experimento espontáneo de un excéntrico químico se volvería pronto una de las moléculas psicodélicas más importantes de la era moderna.
Cuando el eminente químico psicodélico Alexander Shulgin y su colega Michael Carter debutaron 2C-B en 1975, no tenían idea de la bestia que estaban por liberar. Este químico sería el primero de una serie de compuestos relacionados cuyos riesgos y beneficios serían discutidos acaloradamente por químicos, terapeutas y exploradores de la conciencia por décadas. Ya fuere en el dancefloor de un rave o en el sofá de un terapeuta, la 2C-B y sus análogos causaron revuelo. Los agentes de cambio siempre son temidos, sin embargo, varios de estos compuestos fueron ilegalizados en muchos países – aunque su potencial terapéutico fuera mucho más relevante que su relativamente baja toxicidad. Una vez disponibles en head shops de Ámsterdam así como en mercados electrónicos, estos compuestos de la familia 2C son ahora relegados al mercado negro. Algunos de los miembros de la familia 2C son algunas de las creaciones más populares de Shulgin, incluida la afrodisiaca 2C-B. Shulgin estaba especialmente orgullosa de ellos, y con toda justificación.
Nomenclaturas
A principios de los años 1970’s, Shulgin estaba experimentando con DOB, una “extremadamente potente y duradera” anfetamina psicodélica que él mismo había sintetizado siete años antes, cuando descubrió la familia 2C. Shulgin se dio cuenta de que, con un simple retoque, cada miembro de la familia “DOx” podría convertirse en un potente derivado de la familia 2C. Y voilá – una nueva serie de compuestos psicoactivos había sido creada, cada una con su propio perfil psicoactivo.
Para nombrar a cada compuesto, Shulgin usó la letra final de cada uno de sus prototipos: 2C-B está basand en DOB, 2C-I está basado en DOI y así sucesivamente. Todos los químicos de la familia 2Cx son relativamente similares en su estructura química a los de la familia DOx.
Fig 3. Estructura molecular de sustancias DOI vs 2C-I
Alexander Shulgin, el químico psicodélico
La historia de la química psicodélica es, en gran parte, la historia de Alexander “Sasha” Shulgin, el prolífico químico que diseñó y popularizó tantas de estas sustancias. Un viejo sabio de la comunidad psicodélica así como un alquimista de la mente y la materia, Shulgin dedicó su vida al descubrimiento, síntesis y experimentación propia de cientos de nuevas drogas psicoactivas, muchas de las cuales fueron creadas por él mismo.
En una activa trayectoria que duró más de 50 años, prácticamente él solo desarrolló e innovó la disciplina científica de la química psicodélica, empujándola a nuevas fronteras. Para cuando murió a los 88 años en el año 2014, ya se había consolidado como un ícono para muchos entusiastas psicodélicos.
Sasha y su esposa, Ann – una terapeuta psicodélica, conferencista y autora bajo su propio mérito – frecuentemente probaban nuevos compuestos del laboratorio de Sasha. Eran aventureros, pero no imprudentes: Sasha siempre comenzaba con dosis muy bajas antes de probar dosis más elevadas e insistía en ser el primer filtro en caso de que una nueva sustancia resultase tóxica o desagradable.
El interés de Sasha en los psicodélicos comenzó a finales de los años 50’s cuando probó por primera vez la mescalina. Él gozaba de una exitosa carrera en Dow Chemical, pero su pasión giraba en torno a estos misteriosos catalizadores mentales que había probado con anterioridad. Ann una vez calculó que estimaba que su esposo había tripeado como 4000 veces en su vida – ¡Eso es más de una vez a la semana durante cuarenta años!
Sasha apreciaba la especial experiencia del primer contacto. Como muchos exploradores siglos antes que él, Shulgin viajó más allá de su hogar y clavó las primeras banderas en muchas nuevas geografías de la consciencia – el epítome del término “psiconauta” o explorador de la consciencia. En vez de poderosos navíos de madera, el químico se aventuró armado solo con pequeñas cantidades de polvos incoloros. Aunque su destino era incierto, la emoción era evidente: Sentía un “increíble hormigueo” cada vez que sintetizaba una molécula nunca antes vista en el planeta Tierra – “y yo seré el primero en saber qué hace.”
Cada vez que un compuesto demostraba ser digno de mayor análisis, los Shulgin lo compartían con un íntimo círculo de amigos. Este informal grupo de investigación probaría la nueva sustancia en diversas dosis y reportaría sus experiencias detallando la duración, efectos psicoactivos, cualidades psicodélicas, entre otros.
Fig 4. Alexander “Sasha” Shulgin y su esposa Ann Shulgin en Lafayette, California. 2002
Al mismo tiempo, Sasha adoptó una improbable alianza con la U.S. Drug Enforcement Administration (DEA). Como un consultor especial, educaba a los agentes sobre nuevas sustancias, proveía muestras de drogas y ocasionalmente fungía como un testigo experto ante la corte. Como recompensa, poseía una licencia de Categoría I – esencialmente permiso abierto para producir químicos que de otro modo podrían generar largas sentencias penitenciarias. El laboratorio personal que él mismo instaló atrás de su casa por Berkeley, California, sería la envidia de cualquier químico clandestino: Con acceso irrestricto a precursores químicos especiales y con la habilidad de producir nuevos y restringidos químicos sin el riesgo de ser arrestado, era realmente un agente libre.
Pero la sociedad con la DEA no duraría por siempre. Los Shulgin creían que la información sobre sustancias psicoactivas le pertenece al público en general, no solo a entidades policiales. En 1991, publicaron los resultados de su investigación personal en un innovador libro llamado PiHKAL (Feniletilaminas Que He Conocido y Amado): Una historia química de amor. El libro estaba dividido en dos partes: la primera mitad autobiográfica, detallando la íntima historia amorosa de la pareja; y la otra mitad un recetario, con instrucciones paso-a-paso de síntesis e impresiones subjetivas de cada una de las feniletilaminas psicodélicas. La DEA no estuvo feliz con esta publicación. Después de una redada, clausuraron el laboratorio de Shulgin y le pidieron regresara su licencia de Categoría I.
Perseverante, Sasha continuó produciendo y probando nuevos compuestos. En 1997, los Shulgin publicaron otro libro de 800 páginas: TiHKAL (Triptaminas Que He Conocido y Amado), el equivalente triptamínico de su predecesor. La familia química de las triptaminas incluye LSD, DMT y Psilocibina; las feniletilaminas incluyen Mescalina, MDMA y 2C-B. Juntos, los libros cubren más de 200 sustancias a detalle, al mismo tiempo mencionando brevemente o haciendo referencia a cientos más.
La influencia de estos libros, junto con los muchos documentos científicos de Shulgin no pueden ser subestimados. Él era una químico de fuente abierta, que gratuitamente compartía las instrucciones de síntesis de las cientos de nuevas sustancias que había creado. Sus métodos se enfocaban en precursores fácilmente obtenibles, presumiblemente para ayudar a los químicos underground a replicar su trabajo. Durante décadas, químicos, usuarios de drogas, legisladores y policías estuvieron atentos a los nuevos compuestos creados en el laboratorio de Sasha. A tan solo semanas de haber publicado la síntesis química de un nuevo compuesto, aparecía a la venta en internet, generalmente producido por un laboratorio del mercado gris en China. Y después, por supuesto, la DEA lo prohibía, y entonces volvía a aparecer un nuevo tipo de sustancia psicoactiva, de nuevo inspirada por otra publicación de Shulgin, y así sucesivamente.
Fig 5. TiHKAL & PiHKAL, libros psicodélicos legendarios
La experiencia
De todas las invenciones de Shulgin, la 2C-B es punto y aparte. La primera y más famosa de las 2C’s, la 2C-B se ha ganado una reputación de psicodélico consolidado, frecuentemente comparada con la mescalina y el LSD. Lúcida, gentil y hasta erótica, la 2C-B ha sido celebrada por generaciones de psiconautas por su estética belleza y manejabilidad. Un compuesto extraordinariamente flexible, es fácilmente moldeable a las intenciones del usuario, especialmente de dosis bajas a moderadas.
Donde algunos psicodélicos son extremadamente estimulantes y enredan la lengua en nudos, la 2C-B es relativamente tranquila y deja las facultades comunicativas del usuario prácticamente intactas. Cuando alguien se encuentra tambaleándose en el precipicio de una crisis mental inducida por drogas, aferrándose a cualquier cosa que lo regrese a la realidad, la habilidad de comunicarse puede significar la diferencia entre ansiedad momentánea y un completo ataque de pánico. Ubicándose entre las experiencias psicodélicas más suaves y cortas, la 2C-B generalmente sirve como una de las experiencias introductorias al mundo de los psicodélicos.
Shulgin consideraba la 2C-B como su sustancia favorita. La consumía frecuentemente, refiriéndose a ella como la “Gran Maestra”. Quizá más que cualquier otra droga, la 2C-B es reconocida por su naturaleza sensual. Uno de los experimentadores de Shulgin brindó esta descripción:
“Hacer el amor fue fenomenal, pasional, extático, lírico, animal, cariñoso, tierno, sublime… estaba consciente de cada músculo y nervio en mi cuerpo, increíblemente erótico, silencioso y exquisito, casi insoportable.”
En una columna del año 2003 para el Centro de Ética y Libertad Cognitiva, Sasha describió las virtudes de la 2C-B de la siguiente manera:
“Una de las sustancias más agraciadas, eróticas, sensuales e introspectivas que jamás haya creado. Para la mayoría de las personas, es una corta y agradable experiencia psicodélica, sin efectos secundarios tóxicos o eventual resaca. Sus efectos se sienten bastante tanto en el cuerpo como en la mente. La 2C-B abre las áreas emocionales, intuitivas y arquetípicas de tu psique, ayudándote a resolver tus problemas.”
Un amplio atractivo
Efectivamente, la 2C-B originalmente ganó popularidad entre terapeutas y sus pacientes, quienes encontraron el compuesto muy efectivo para adoptar relaciones compasivas, así como para sacar a la luz traumas e inseguridades en una manera no amenazante. Al igual que la MDMA, se corrió la voz y la 2C-B rápidamente se expandió más allá de sus raíces terapéuticas. La sustancia invadió las fiestas y las recámaras mientras ganaba reputación como un potenciador táctil, emocional y sexual. Durante su etapa legal, una compañía alemana la vendía como un afrodisiaco llamado “Erox”.
Fig 6. Los efectos de la 2C-B son psicodélicos pero también afrodisiacos
Smart shops holandesas también vendían 2C-B como una especie de “éxtasis legal” bajo el nombre “Nexus”. El apodo sigue siendo usado ocasionalmente, y es especialmente adecuado para una sustancia en la intersección de tantos intereses y disciplinas. Desde química y psiquiatría hasta música y romance, la 2C-B cruza muchos caminos.
Cuando los políticos y las agencias policiales empezaron a interesarse por la 2C-B, sus días como psicodélico legal estaban contados. Estados Unidos la prohibió en 1995; para el año 2000 ya estaba prohibida alrededor del mundo.
Significando muchas cosas para diversas personas, la 2C-B arroja luz sobre nuestra arbitraria clasificación de drogas. Donde los terapeutas vieron una extraordinaria nueva medicina, las parejas vieron un poderoso afrodisiaco y los jóvenes ravers vieron un nuevo e interesante estado de consciencia al cual se podía acceder. Mientras tanto, las agencias policiales y muchos ciudadanos con buenas intenciones pero mal informados – influenciados por reportajes sensacionalistas y décadas de propaganda antidrogas – vieron y continúan viendo solo una peligrosa droga de fiesta. 2C-B es todo eso y a la vez, nada. La molécula no ha cambiado, solo nuestro enfoque sobre ella.
Los primos: 2C-E, 2C-I y 2C-C
En términos generales, los otros miembros de la familia 2C – y hay docenas, si no es que cientos – son variaciones de un tema. Todas comparten ciertas características, ya sean percepciones “tripeadas”, sensaciones corpóreas inusuales así como distorsiones visuales con texturas “digitalizadas.” Aun así, cada una tiene su sabor particular.
La 2C-E es notable por su intensidad. Incluso psiconautas experimentados la describen como una sustancia compleja, ya que puede producir estados mentales profundos e introspectivos que pueden tomar desprevenido a cualquiera. Es frecuentemente descrita como una “fría maestra”, pero que enseña valiosas lecciones. Las sensaciones físicas, que asemejan agujas y alfileres que cubren todo el cuerpo, pueden ser abrumadoras. Sin embargo, para exploradores serios, las recompensas justifican el viaje. Los fans de la 2C-E aseguran que esta sustancia ofrece insights personales y efectos visuales excepcionales.
La 2C-I y la 2C-C son de intensidad mucho más ligera y generalmente usadas en contextos recreacionales. Duran de 4 a 7 horas. Los visuales tienden hacia lo fractal y el aspecto mental es igualmente tripeado pero no abrumador en dosis normales. Aun así el margen de error es muy pequeño – unos cuantos miligramos son la diferencia entre una noche increíble y una crisis mental. Las sensaciones corpóreas también pueden ser intensas, especialmente con la 2C-I. Lo que para algunos puede ser una extraordinaria sensación táctil, para otros puede ser un malestar corporal que solo el paso del tiempo puede aliviar.
El futuro de la 2C-B en la terapia psicodélica
Tal vez esto no es el fin de las terapias psicodélicas, sino un lento y abultado comienzo. La MDMA ha regresado a la luz terapéutica, como una herramienta de gran interés para la psiquiatría. Tanto el LSD como la Psilocibina también están regresando como herramientas legítimas para el tratamiento de diversos trastornos, como la ansiedad y la adicción al tabaco. Quizá algún día, los compuestos de la familia 2C, amados por terapeutas, amantes, curanderos africanos y ravers de todo el mundo, puedan resurgir de la oscuridad hacia el mundo de las medicinas legales. Si esto llega a pasar, muy probablemente será la 2C-B la que lidere el camino.
Medicina de los ancestros que cantan
En Sudáfrica, los sangomas u hombres medicina de la tribu Xhosa tradicionalmente han usado una amplia variedad de plantas locales para producir un elemento visionario que consumen en ceremonias tribales. Llamado “Ubulawu Nomathotholo”, o medicina de los ancestros que cantan, los chamanes beben este espumoso brebaje para facilitar la curación, para profetizar así como para comunicarse con sus ancestros. Ubulawu ha sido una piedra angular del estilo de vida Xhosa por generaciones.
Pero debido al aumento de la escasez y el costo de estas plantas visionarias, así como su considerable toxicidad, los sangomas empezaron a utilizar 2C-B como un sustituto. Cuando era legal en los 90’s, los curanderos obtuvieron la sustancia de herbolarias y head shops locales, quienes importaban la sustancia del extranjero.
Fig 7. Ubulawu Nomathotholo
Para los chamanes Xhosa, la 2C-B servía como un digno sustituto, incluso superando su poción tradicional en algunos aspectos. Era de fácil acceso, físicamente agradable y con muy pocos efectos secundarios negativos. Aún más importante, los sangomas estaban complacidos cuando descubrieron que la 2C-B los llevaba al mismo reino espiritual que sus medicinas tradicionales. Pero esto no duraría: El nuevo Ubalawu fue prohibido en 1998 y los chamanes Xhosa tuvieron que regresar a usar sus escasas y más tóxicas plantas desde entonces y hasta la fecha.
El texto en su totalidad es una traducción fiel al español del capitulo sobre 2C-B del libro “Medicina Mágica” de Cody Johnson. Páginas 13 a la 19.
Fuentes:
- Boal M. “The Agony & the Ecstasy of Alexander Shulgin.” Playboy. 2004.
- Benson T. “All ‘Smiles’: the history of the 2C designer drug class.” The Verge. www.theverge.com/2015/7/15/8962743/all-smiles-the-history-of-the-2c-designer-drug-class. Published July 15, 2015.
- Brown Ethan. “Professor X.” Wired Magazine. September 1, 2002. www.wired.com/2002/09/professorx/. Published September 1, 2002.
- Cohen D. Freud on Coke. Luton, UK: Andrews UK Ltd; 2011.
- Mahavishnu. “Between Nothingness and Infinity: An Experience with 2C-B, 2C-C, 2C-E & 2C-I (exp85144)”. Erowid.org. Jul 22, 2010. www.erowid.org/exp/85144.
- Shulgin A. “2,5-dimethoxy-4-bromophenethylamine (2C-B).” Ask Dr. Shulgin Online. Center for Cognitive Liberty & Ethics. www.cognitiveliberty.org/shulgin/adsarchive/2cb.htm. Published Feb. 7, 2003.